Un ángel gris
iluminaba su pequeñez
en una hoja,
los abedules y los fríos inviernos
quedaron en sus ojos
de mirlos agónicos.
Armas en las manos,
Como rapaces verdugos
Temblando.
Aquellos de piernas separadas
en el muro y sus ojos
al negro pavimento.
Tensan sus sienes para sobrevivir,
rezaban veloces plegarias,
por los peces heridos arrastrados al mar.
La utopía
Hizo de los sueños escombros.
Ondula el viento
seda negra,
pabilo de encaje que entorna el cuello de
cualquiera,
la realidad es un envoltorio,
una espuma secreta
que te arrincona
falaz.
falaz.
La sandalia sintética,
un verbo perfumado
bellos jacintos riegan
bellos jacintos riegan
de soslayo esta sociedad.
Nada ha cambiado
y el abismo miente
el cruce de la luz
el cruce de la luz
en la grieta
de tu guarida.
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